27/01/2021
El Castillo de Santa Bárbara: una visita imprescindible
Alicante es una ciudad llena de historia cuya personalidad ha sido forjada por el mar durante siglos. El Castillo de Santa Bárbara, situado en la cima del Monte Benacantil, es el gran emblema de la capital alicantina y situado en pleno centro de la ciudad le otorga un inconfundible perfil de postal reconocible en todo el mundo.
Hoy te proponemos una interesante visita en la que disfrutar de esta joya del patrimonio cultural de la provincia de Alicante. El Castillo de Santa Bárbara ofrece un interesante recorrido por el legado histórico y artístico de la ciudad y reserva una impactante sorpresa para todos aquellos que se aventuren a coronar su cima: las impresionantes vistas panorámicas a la bahía de Alicante, desde Santa Pola hasta Benidorm y con la isla de Tabarca como telón de fondo en el horizonte.

La historia del castillo de Santa Bárbara
El Castillo de Santa Bárbara tiene su origen en el siglo IX durante la etapa de dominación musulmana de la ciudad. Desde entonces y a raíz de la conquista de Alicante por parte del rey cristiano Alfonso X El Sabio la antigua alcazaba fue remodelada en múltiples ocasiones, añadiendo nuevas estancias, alargando sus murallas y adoptando los diferentes estilos arquitectónicos propios de cada periodo, llegando a incluso a actuar como una prisión en tiempos de guerra.
La leyenda de la Cara del Moro
Entre su dilatada historia destaca un capítulo de tal importancia que esconde el porqué del nombre de la ciudad de Alicante. Cuenta la leyenda que en sus orígenes el castillo estaba habitado por un califa cuya bellísima e inteligente hija sería a su muerte la heredera del título y pasaría a gobernar la ciudad. Llegó el momento en que Cántara, que así se llamaba la princesa, debía casarse y fue a raíz de la lucha suscitada entre sus dos pretendientes donde se originó el nombre de Alicante.
Los dos hombres eran honestos, educados y apuestos, pero mientras Ali era un muchacho sencillo al que apreciaba la princesa, Almanzor era un famoso guerrero que provenía de una familia adinerada de Córdoba para desposarse con la princesa.
El califa no consentiría que su hija contrajese matrimonio con un simple muchacho y decidió ordenar una gesta heroica a ambos hombres para que demostrasen su valía y ser dignos del corazón de su querida hija. Así encargó a Almanzor viajar hasta la India y regresar cargado de especias y tesoros para el reino.
En cambio, mandó a Ali construir una acequia que condujese hasta Alicante las aguas cristalinas de la montaña para el consumo de sus habitantes. Quien antes cumpliera con su hazaña sería proclamado vencedor y obtendría el favor del califa.

Almanzor se lanzó al mar con la mayor diligencia mientras Ali aprovechaba cada noche después de trabajar en su encargo para verse con Cántara a la luz de la luna y recitarle poemas y canciones de amor. El califa no lo sabía, pero el corazón de su hija ya tenía dueño, cumpliese o no su encargo.
Pasaron los meses mientras Ali y Cántara disfrutaban como dos enamorados cada atardecer, hasta que una noche de luna llena irrumpió en el puerto Almanzor a bordo de un enorme velero cargado de seda, oro, marfil e innumerables clases de especias.
El califa ordenó a Cántara desposarse con Almanzor pese a que ella no podía dejar de llorar. Ante tal inmenso dolor, Ali no dudó en quitarse de en medio y saltó desde lo más alto del castillo. El impacto de su cuerpo en la ladera del Benacantil fue esculpiendo en la roca un rosto familiar tocado por un clásico turbante.
La efigie de Ali había quedado para siempre grabada en la montaña a la vista de todo el mundo como castigo a ese padre que prefirió para su hija el dinero y la fama antes que el amor. Cántara, desolada, quiso para sí misma un final como el de su amado y también saltó.
El padre estaba muy arrepentido y nunca pudo volver a ser el mismo. Desde entonces procuró ser un gobernante justo con su pueblo hasta el fin de sus días. La historia corrió como la pólvora en todo el reino y sus súbditos, conmovidos con la tragedia, decidieron compensar a aquellos dos jóvenes amantes y que sus nombres estuvieran para siempre unidos en el topónimo de la ciudad: Alcántara, que acabaría derivando con el paso del tiempo en Alicante.

Como ir al castillo de Santa Bárbara de Alicante
Apenas 30 km. separan Villajoyosa de Alicante. En poco más de media hora desde el Hotel Montíboli, tomando la N-332 en dirección sur, puedes llegar al corazón de la fantástica capital alicantina y disfrutar de esta inolvidable propuesta cultural. Pese a ser una edificación defensiva de la época medieval y estar ubicado en la cima de una montaña, la planta del castillo es bastante plana y agradable para el paseo. Además, el castillo disfruta de una ubicación muy céntrica y es accesible para todos los públicos de diferentes formas:
Ascensor
Subir en ascensor al castillo desde la playa del Postiguet es posible en solo unos minutos gracias a los dos ascensores que atraviesan las entrañas del Monte Benacantil. Para acceder a ellos, basta con recorrer el túnel que se abre paso bajo la antigua muralla de la ciudad en el nº1 de la calle de Jovellanos. ¡Fácil, accesible y toda una aventura!
Caminando
Se trata de la mejor opción para no perderse ninguna panorámica del castillo. Los ascensos al macho del castillo por las murallas desde el parque de la Ereta, el parque de la Tuna o el Barrio de Santa Cruz conforman una ruta de lo más interesante para acceder a pie al castillo de Alicante, pero que exige cierto nivel físico para no alcanzar rendido la cima del Benacantil.
Autobús
Para subir a la cima del castillo en transporte público es posible utilizar la línea turística de Alicante (TURIBUS) que recorre todo el centro de la ciudad. ¡Es inconfundible! Se trata de un autobús descubierto de color azul que recorre las principales avenidas de Alicante y que se puede coger en la playa del Postiguet.
Coche
El castillo dispone de un parking para vehículos particulares a la entrada del mismo en lo alto del Benacantil y el acceso se realiza desde la avenida de Jaime II.

Precio y horarios del castillo de Santa Bárbara
En los meses de verano (de abril a septiembre) el horario de apertura del castillo es de 10h a 22h todos los días. El resto del año (de octubre a marzo) el horario se reduce de 10h a 20h.
La entrada al castillo es gratuita, aunque existe una tasa de 2,70 euros por hacer uso del ascensor.

Otras actividades para hacer en la fortaleza
Visita el Museo de la ciudad de Alicante MUSA
Si la arquitectura del castillo ya supone en sí misma un motivo suficiente para su visita, las diferentes salas y estancias que antaño fueron testigo de momentos trascendentales para la ciudad, hoy acogen el MUSA.
El MUSA es un museo que recorre la historia de Alicante a través de fotografías, documentos históricos, objetos y obras de arte de las diferentes civilizaciones que han ocupado las tierras alicantinas desde la prehistoria.
La Casa del Gobernador, la Plaza de Armas, el Baluarte de la Reina… son algunos ejemplos de los diferentes puntos de interés del castillo que no podrás perderte durante tu visita. Contemplar los vestigios del pasado que todavía permanecen en estos lugares te permitirá hacerte una idea de cómo era la vida en el castillo de Santa Bárbara siglos atrás.
Visitas guiadas
Las visitas al castillo de Santa Bárbara se realizan en español, valenciano e inglés y recorren las diferentes edificaciones del castillo haciendo un recorrido por su historia. Hay diferentes horarios según la época del año y distintas formas de realizar la visita según el tipo de público. Puedes informarte de visitas guiadas y teatralizadas desde la página web oficial del Castillo de Santa Barbara.
Ocio y restauración
Existen varios quioscos y terrazas en los que disfrutar de la restauración en el castillo. Además, en las noches de verano se ofertan cenas con las que probablemente sean las mejores vistas de la ciudad y conciertos de música al aire libre.
Esperamos que estas palabras hayan servido para seducir vuestro apetito cultural y decidáis organizar una visita al castillo de Santa Bárbara durante vuestra estancia en el Hotel Montíboli.
Por último, te recomendamos visitar la página web del Ayuntamiento de Alicante para estar informado de cualquier cambio de última hora que pueda afectar tu visita. ¡No te lo pierdas!