10/10/2023
Descubrimos el Casco Antiguo de Villajoyosa y sus casas de colores
El Casco Antiguo de Villajoyosa es uno de los mejores ejemplos de la arquitectura tradicional de la Comunidad Valenciana y un verdadero reclamo para los que desean perderse en un pueblecito mediterráneo que ha sabido conservar su carácter con el paso de los siglos.
Por todo ello, son infinidad los viajeros que nos comentan que, si hay una localidad marinera que puede presumir de una personalidad única en toda la costa española, esa es Villajoyosa. ¿Las culpables? Sus centenares de casas de colores que se extienden hasta el mar convirtiendo la ciudad en un lugar que derrocha alegría, en honor a su nombre “Vila-Joiosa”, que podría traducirse como “ciudad jovial”.
¡Vamos a conocer cada rincón del Centro Histórico de Villajoyosa!
El origen del Casco Antiguo de Villajoyosa
El Centro Histórico de Villajoyosa ha preservado su arquitectura popular, resultado de su auge comercial en el siglo XVIII cuando los ataques de piratas berberiscos fueron desapareciendo y el puerto pesquero se convirtió en un motor económico de lo más floreciente.
Los pescadores, comerciantes y artesanos hicieron entonces de Villajoyosa un lugar próspero, y construyeron la ciudad siguiendo la arquitectura tradicional de otros puertos con los que establecieron relaciones comerciales. Así, importaron la estética de las villas marineras del norte de Italia o el sur de Francia: casas bajas de mampostería enlucida y pintadas de vivos colores con pequeños balcones al abrigo de las viejas murallas de origen renacentista.
Por esta razón, el Casco Antiguo de Villajoyosa fue declarado Bien de Interés Cultural. Y no por albergar numerosos palacios o casas solariegas de familias nobles como es clásico en los centros históricos de las grandes ciudades, sino por su buen estado de conservación y su identidad tan personal dentro del conjunto de villas marineras de España.

¿Qué tiene de especial el Centro Histórico de Villajoyosa?
Sin duda, sus casas de colores. Las llamativas fachadas invitan a pasear y perderse por sus estrechas callejuelas e ir descubriendo el sinfín de detalles que en él se esconden en forma de macetas de geranios, azulejos artísticos, comercios tradicionales e incluso instalaciones de arte contemporáneo que llaman poderosamente la atención de los visitantes.
Pero, sin duda, la imagen más clásica de Villajoyosa es la que componen las casas situadas sobre el río Amadorio, que desemboca en el propio Casco Antiguo de Villajoyosa, junto a la Playa Centro. Estas casas de colores están construidas en la muralla, colgadas literalmente sobre el cauce del río dando lugar a una panorámica espectacular.
¡Por cierto! No hay mejor lugar para disfrutar de estas vistas que el Puente del Río. Son espectaculares.

Ruta de lugares que no debes perderte en el Casco Antiguo de Villajoyosa
¿Qué mejor para empezar a recorrer el Centro Histórico de Villajoyosa que hacerlo desde el mar? El Paseo San Pedro o “Passeig Sant Pere” es el centro neurálgico del municipio, sobre todo en verano, cuando rebosa de vida a cualquier hora del día. Este pintoresco paseo repleto de heladerías y restaurantes, que se extienden en una explanada que hace varios siglos ocupaba el mercado de pescado cuando los barcos atracaban allí mismo, conecta la playa y el Casco Antiguo.
Desde allí y bordeando la muralla, también declarada Bien de Interés Cultural en 1985, parte la calle Costera de la Mar, que debemos ascender mientras disfrutamos de los detalles que los colosales muros ofrecen a cada paso. Las murallas de Villajoyosa, tal y como las conocemos hoy en día, se remontan al siglo XVI y son uno de los últimos ejemplos del antiguo sistema de defensa medieval en el que las ciudades se construían a expensas de la muralla. De hecho, la propia Iglesia de la Asunción se integra como una iglesia-fortaleza y su ábside constituye la torre principal de la muralla.

Al final de la Costera de la Mar se encuentra la parte más alta del Casco Antiguo, coronado por la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, de nuevo declarada como Bien de Interés Cultural. El templo es de estilo gótico levantino tardío y comenzó a construirse hacia el año 1550, aunque cuenta con una capilla barroca de gran esplendor dedicada a la patrona del municipio, Santa Marta.
Desde este punto, sólo queda deambular sin rumbo, disfrutar de cada rincón, cada plazoleta y cada callejuela cuajada de casas de colores: verdes, azules, rojas, amarillas... Así se descubre la esencia de Villajoyosa y su verdadero color.

¿Cómo llegar al Casco Antiguo de Villajoyosa?
El Casco Antiguo de Villajoyosa tiene varios aparcamientos que se pueden utilizar a la hora de planear una visita, aunque también se puede acceder hasta el corazón del municipio a bordo del TRAM.
Los que decidan ir con su propio vehículo, podrán escoger entre el parking subterráneo bajo el Paseo San Pedro, junto a la Playa Centro, o el aparcamiento en superficie de la Playa de la Mallaeta, ambos junto al Casco Antiguo de Villajoyosa, con muy fácil acceso y multitud de carteles por todo el municipio que indican cómo llegar. Sólo 15 minutos separan cualquiera de los dos aparcamientos del Hotel Montíboli.
Si prefieres dejar el coche y usar los servicios del TRAM, podrás escoger entre las paradas La Vila Joiosa o Creueta, ambas muy cercanas al Casco Antiguo de Villajoyosa y fácilmente conectadas con Alicante, Benidorm o el Hotel Montíboli, situado muy cerca de la parada Paradís.

¿Qué ver cerca del Casco Antiguo de Villajoyosa?
Villajoyosa es un lugar privilegiado que cuenta con numerosos atractivos más allá de su Centro Histórico.
Si hablamos de naturaleza, el municipio se encuentra rodeado de bellos paisajes que merece la pena conocer. En el interior, podemos encontrar lugares tan especiales como el pantano del Río Amadorio y su ruta a la presa, pero es en la costa donde Villajoyosa explota todo su atractivo.
En la zona norte, el Sendero de la Costa recorre el litoral ofreciendo espléndidas panorámicas con la isla de Benidorm al fondo y pequeñas calas de aguas azul turquesa como la preciosa Cala Racó del Conill. Al sur, donde se ubica el Hotel Montíboli, son infinitas las playas rodeadas de bellos acantilados que podemos encontrar, como la Cala del Xarco.
Y para aquellos que sigan teniendo sed de cultura, también hay numerosas recomendaciones como el VilaMuseu, el museo que recorre la historia de Villajoyosa a través de hallazgos arqueológicos tan destacados como el Bou Ferrer. O los museos del chocolate, o las torres vigía que salpican todo el litoral vilero… ¡Cuánto por descubrir!

Así que ya lo sabes, aprovecha tu visita a Villajoyosa para disfrutar del mar, pero no te pierdas su precioso Centro Histórico. Además, con nuestras recomendaciones, estamos seguros de que conseguirás infiltrarte como un lugareño más y sentirás todo el carácter de este precioso pueblo marinero que cautiva con sus colores a todo aquel que se aventura a visitarlo. ¡Sé el próximo!